Hace apenas dos siglos de la invención de medios de comunicación como la computadora y el teléfono, hace poco más de medio siglo que surge el internet, casi tres décadas de que emergieron los hipertextos y hace 18 años de este siglo, en que la tecnología ha avanzado a pasos acelerados con la aparición de la Web,  lo que ha llevado a la llamada Era digital, donde cada vez más se utiliza la tecnología para actividades económicas, sociales y también para las académicas. Algunos especialista han puesto en duda el término “Era digital”, llamándolo “Revolución digital” debido a los cambios radicales que se viven cada día y han sugerido que esta condición requiere de un perfil nuevo en los seres humanos, ya que se necesitan usuarios y mediadores de información más activos tecnológicamente, así como nuevas estructuras de mayor productividad que lleguen más rápido a sus destinatarios. Concretamente, el ámbito académico y de investigación no escapa a dichas necesidades, por ello, surge el siguiente postulado: en la actual Era lo que prevalecerá son las revistas científicas digitales y con este también surge la pregunta ¿estamos preparados?  El proceso de edición digital requiere de diversos pasos, en el caso de los investigadores conocen bien su labor –investigar y comunicar sus hallazgos–, y lo han hecho, plasmándolo en revistas impresas. Por ello el primer paso de dicho proceso se cubre, pero también es necesario conocer y dominar ambientes donde las tecnologías de la información y la comunicación son requisitos indispensables, no sólo para el que crea el conocimiento científico sino para el editor del medio que lo difunde. No debe perderse de vista que las revistas digitales surgieron como complemento de las versiones impresas y que hasta hace nueve años, estas últimas gozaban de veracidad total al compararlas con las digitales. No obstante, las revistas impresas, deberán adaptarse y evolucionar a los cambios vertiginosos del siglo XXI y a la Era digital. La tecnología digital atrae a muchos usuarios que hoy en día pueden estar conectados en diversos medios al mismo tiempo, por tanto, se trata de usuarios activos y selectivos, no sólo para comunicar sus hallazgos sino para ser lectores de ello, de tal modo, que también son necesarios los profesionales ad hoc a los cambios, donde la capacitación es punto clave para adaptarse y sobrevivir a la Era digital informacional, por tanto, prepararnos es el reto para evolucionar.